Ya os he contado el placer que representa recorrer las autopistas
Austriacas tanto en verano como en invierno, entonces
me refería a la autopista A-10 que cruza el país de Sur a Norte. Ahora tengo la
oportunidad de recorrer la A-9, que lo hace en sentido Este-Oeste, y más de lo mismo, un
paraíso para el que disfrute de los panoramas alpinos (Ver fotos 1 a 4).
No me cansaría de pasar por estos lugares, ya que la luz siempre es diferente, las nubes, la
nieve, las tonalidades verdes de los árboles, los olores diferentes de la hierba cuando
está recién cortada, cuando está mojada por la lluvia. Alojarse cada noche en una casa
particular diferente de cualquier pueblo pequeño, y disfrutar de la hospitalidad de unos
jubilados, o de unos campesinos, desayunar con leche fresca, eso si, olvidaros, no encontrareis
vacas lilas...