Punta Hannah-3. Isla Livingston. Islas Shetland del Sur. Antártida

Marzo 2009

Si la tierra y el mar antártico son extremadamente ricos en vida animal, la vida vegetal es más que limitada y está compuesta por unas pocas especies de líquenes, algas, hongos y un par de plantitas con flor. Esto tiene una fácil explicación, y es que aparte del clima riguroso de estas latitudes, solo apenas el 0,4% de la superficie de la Antártida se encuentra libre de hielo y nieve.
Aquí en Punta Hannah caminando por la Bahía Walker donde nos encontramos pudimos ver toda esa flora: Pastos (Deschampsia antártica) formando pequeños parches o incluso cubriendo partes de colinas despejadas de nieve (foto 1), Musgos (foto 2), pequeñas hierbas aisladas (foto 3), y líquenes (foto 4). Y el pequeño clavel antártico (Colobanthus quietensis) (foto 5), y junto a estos, pudimos incluso detectar o "descubrir" un pequeño y curioso hongo (foto 6), que evidentemente no es nativo, sino introducido por el hombre seguramente sin saberlo, portando algunas esporas quizás en unas botas sucias, o de cualquier otra manera accidental.
Luego descubrimos unos fósiles, principalmente helechos (fotos 7 y 8), lo que evidencia que no siempre fue así, y es una prueba inequívoca de un pasado más cálido en esta región y testimonio de los bosques que alguna vez poblaron el área...