Ritual Chamán. Expedición al Cerro Autana. Edo Amazonas. Venezuela

Septiembre 2007

Hace un año, cuando regresé de mi primer viaje por estas Comunidades Indígenas del Orinoco, y viendo la total necesidad de cualquier cosa que se les pueda llevar, empecé a guardar toda esa ropa y calzado, que aun estando en buen estado ya no utilizo, y hasta llenar una caja bien grande, porque sabía que volvería, y se la podría llevar. Ese día llegó, y al llegar a la Comunidad Indígena Mavaco, que aunque no era el lugar más alejado al que pensábamos intentar llegar, por temor a que una lluvia estropeara la ropa que iba en el techo del bongo, allí mismo pregunté por el jefe de la comunidad o "Chamán", al que ofrecí mi caja de ropa. Este se alegró mucho, y aunque no hablaba más que unas pocas palabras de castellano, con la ayuda de nuestro guía de la etnia Piaroa, nos pudimos entender.
La sorpresa vino en la noche, cuando terminábamos de cenar y estábamos charlando, aparece el "chamán", y se ofrece a realizarnos como agradecimiento el ritual sagrado chamán (foto 1). Este ritual sólo se realiza entre la comunidad, es privado, incluso las mujeres de la etnia no lo pueden observar, mucho menos los turistas.
El ritual se inició mostrándonos los utensilios que utilizaría (foto 2), todos realizados a mano con recursos de la naturaleza, maderas, pelos de animales, cuernos de jabalí, plumas, etc (foto 3).
Después cantó unas canciones en lengua piarora, que nos situaron en un estado de semi-trance, muy emocionante. Y entre canción y canción procedía  a la preparación del famoso polvo de Yopo (foto 4), una semilla que se cultiva en la zona, y que tostada y triturada se convierte en un potente alucinógeno natural. En el momento en que las canciones y ritmos trance nos tenían extasiados, el chamán comenzó a esnifar el Yopo ya preparado. Y la sorpresa vino cuando se me acercó y me ofreció a mí en primer lugar su propia pipa (dos huesos huecos que se colocan en la nariz), para esnifar (foto 5), Los que quisieron del grupo pudieron experimentarlo, ?Que se siente ?, yo que no había esnifado nada en mi vida, pues como si me entrara por la nariz un picante polvo de pimienta, que hacía irreprimible el que estornudara.
Bueno, me hice amigo del chamán, me ofreció además su propio tabaco (foto 6), el que el mismo cultiva, seca, prepara y se fuma...