Valletta es la capital de Malta, y con un esplendor desproporcionado a su
tamaño, ya que ocupa solo una superficie de un kilómetro de largo por medio de
ancho, tiene un poderoso perfil arquitectónico, semejante a una gran fortaleza
amurallada. La mejor forma de admirarla toda completa es desde el mar. Para ello
se pueden tomar unos pequeños barcos turísticos que parten del puerto de Sliema,
que es una población turística al lado de esta, repleta de hoteles.
La vista de Valletta desde Sliema ya es espectacular (foto 1), así que nos
dirigimos a uno de los puestecitos de los pequeños cruceros (foto 2), y elegimos
el recorrido que deseamos, el cual nos llevará desde Sliema, pasando por
Valletta hasta Vittoriosa.
Como buenos piratas, esperamos pacientemente nuestro barco comiendo un helado
(foto 3), hasta que aparece con la ciudad de Valletta como fondo (foto 4).
Embarcamos felices y a navegar (foto 5). Y en pocos minutos estamos frente a
Valletta (fotos 6 y 7). recorremos su puerto (foto 8), vemos sus antiguas
entradas fortificadas, y podemos admirar de cerca multitud de detalles desde las
antiguas torres y almenas (foto 9), a las más modernas construcciones añadidas a
la antigua muralla: las defensas antiaéreas construidas en la Segunda Guerra
Mundial (foto 10)...