Presentación de cartas credenciales a S. M. el Rey. Madrid. España

Septiembre 2022

Puede que paseando por el centro de Madrid os encontréis con un desfile de carrozas reales protegidas por la Guarda Real montada a caballo, pues no es que vaya el rey de paseo, se trata de el acto de presentación de cartas credenciales a S. M. el Rey.
El acto de presentación de las cartas credenciales puede ser considerado una de las ceremonias más solemnes de la vida diplomática de un país y donde España expone uno de los protocolos más antiguos y de mayor prestigio de Europa.
Su origen puede encontrarse en el año 1527 cuando el rey Carlos I estableció un protocolo específico de origen borgoñón para la recepción de los enviados extranjeros, donde se detallan, entre otras cosas, todas las ceremonias de la Corte. Hoy en día, la ceremonia se mantiene prácticamente intacta en su desarrollo tal y como Felipe V estableció en su Reglamento de Ceremonial del año 1717 con las naturales adaptaciones a los tiempos.
En la actualidad, S. M. el Rey en virtud de lo dispuesto por el artículo 59.1 de la Constitución Española, asume la más alta representación del Estado español en las relaciones internacionales y en base a ese artículo, la propia Carta Magna desarrolla el artículo 63.1 en el que manifiesta que El rey acredita a los embajadores y otros representantes diplomáticos. Para ello se recurre a un acto de especial relevancia en el que los embajadores extranjeros presentan sus credenciales a través de unas cartas, consideradas documentos oficiales, en las cuales el jefe de estado remitente presenta a su representante, el embajador, ante el jefe de estado español. En dichas cartas consta el carácter representativo del diplomático, se expresa su confianza en su capacidad, se detalla su misión y la amplitud de sus facultades, al tiempo que se solicita plena fe y crédito a las actividades que emprenderá en nombre de su gobierno, dando lugar a una cordial relación con las autoridades de los dos países.
Este acto no tiene una frecuencia periódica puesto que depende del placet (aprobación por parte del estado receptor al nombramiento de un embajador extranjero) y se hacen coincidir varias delegaciones en un mismo día.
Durante el acto, cada embajador es trasladado de forma individualizada en berlinas del siglo XIX y escoltado de forma solemne por la Guardia Real desde el Ministerio de Asuntos Exteriores hasta el Palacio Real de Madrid donde es recibido por S. M. el Rey tal y como se realizaba hace cientos de años...