Edam. Holanda

Agosto 2011

Todos hemos oído y la mayoría probado el queso Edam, conocido coloquialmente como "el queso de bola", es ese famoso con la corteza de color rojo o amarillo, y más seco que el de Gouda. Pues viene de esta población holandesa de Edam.
Edam es una ciudad con una historia muy rica, que comenzó en el siglo XII. La ciudad se desarrolló y prosperó en el siglo XVII, y hoy se puede visitar aun esa arquitectura auténtica del siglo XVII. Su iglesia (foto 1) la "Grote Kerk", es un edificio de tres naves coronada por una torre, cuyo edificio es del siglo XV, sus casas antiguas (foto 2), sus viejas calles decoradas con flores (foto 3), sus canales (foto 4), con sus antiguos puentes y esclusas (foto 5).
En el centro de la población se encuentra el Ayuntamiento construido al estilo Louis XIV, con una hermosa torre de madera, y frescos con pasajes de la Biblia en sus paredes.
Pero hay que venir aquí en verano y en miércoles, pues son esos días cuando se celebra su famoso "Mercado de Queso" (se pueden consultar las fechas en la web oficial del mercado del queso).
En la plaza del Ayuntamiento, y desde que se puso la balanza pública en 1778 se celebra este mercado (foto 6). Pero incluso antes, ya en 1649 se llegaron a exportar quinientas mil unidades del famoso queso.
Esos días de mercado, desde temprano comienza el ajetreo, y los quesos de bola van de un lado para otro, puedes ayudar a mover carros (foto 7), comprarte un cacho de queso (foto 8), pesar las bolas (foto 9), incluso jugar con ellas (foto 10), y poco a poco con ayuda de mozos (foto 11), carretillas (foto 12), y algo de habilidad en el manejo de los quesos (fotos 13 a 15), pues toda la plaza se llena de quesos y comienza el espectáculo, quiero decir el mercado. Con presentadores en varios idiomas, artistas invitados (foto 16), desfiles de carretas (foto 17), todo tipo de vehículos antiguos (foto 18), trajes de época (foto 19), trajes típicos holandeses (foto 20), y lo mejor de todo, guapas holandesas que van pasando entre el público para que prueben sus quesos...