Aunque Gafsa ya es una ciudad importante con amplias avenidas, y
modernos edificios y mezquitas (foto 1), debe su antigua importancia a su oasis
y palmeral, aunque hoy su producción datilera es mediocre. Los restos
arqueológicos más importantes aquí descubiertos, pertenecen a la cultura
captiana (de Capsa, que es el topónimo romano de este lugar), y datan de
alrededor del siglo II a.C, aunque antes ya fue una importante ciudad númida en
el 10 a.C.
Hoy si paseamos por Gafsa y sus mercados podremos ver sus como trabajan al aire
libre sus comerciantes y artesanos (foto 2), y al típico tunecino de a pié con
su chilaba (foto 3).
Después hay que dejar perderse por sus callejuelas (foto 4), y por sus calles
porticadas llenas de capiteles y columnas romanas (foto 5), aunque por cualquier
sitio encontraremos antiguas casas o portales interesantes (foto 6).
La kasba, aunque demolida en parte por la explosión de un depósito de armas,
mantiene prácticamente intactas sus murallas y torres cuadrangulares
fortificadas, flanqueadas por torres semicirculares (fotos 7 a 9).
Muy cerca de ella, se encuentra el vestigio más importante de la antigua Capsa:
las piscinas romanas (fotos 10 a 12). La verdad es que nosotros llegamos a ellas
con el bañador puesto dispuestos a darnos un baño, ya que no todos los días uno
se puede bañar en un baño romano auténtico, pero con gran desilusión nos las
encontramos casi vacías, y llenas de basura y escombros (fotos 13 a 14), así que
no nos quedó más que sentarnos en su borde e imaginarnos como sería darse un
baño aquí (fotos 15 y 16). Nos dijeron que desde que comenzó la revolución, se
abandonó el mantenimiento en espera que vuelva de nuevo el turismo. Estas
piscinas romanas, constan de dos piletas de 4m de profundidad, encerradas por
altas murallas de piedra tallada comunicadas entre si y alimentadas por
manantiales que brotan en el fondo de las piletas. Estas que conservan restos de
inscripciones romanas (foto 17). Aunque restos romanos los encontrareis
diseminados por toda la ciudad (foto 18)...