Cada año, desde hace más de 600 llega Sinterklaas (el San
Nicolás holandés) (foto 1) puntualmente el 5 de Diciembre para traer alegría y
chocolates a los niños. En Alemania llega a Postdam una semana más tarde montado
en su caballo blanco (bueno este año en uno negro, porque el blanco se
accidentó, dijo) (foto 2), y es que en esta ciudad hay un barrio holandés, ya
que trabajadores holandeses llegaron invitados por Guillermo I a principios del
siglo XVIII. Entre 1733 y 1742 se construyó un barrio compuesto por cuatro
grupos de 134 casas con tejados a dos aguas típicos holandeses (fotos 3 y 4).
Las casas de tres pisos rematadas con hermosos tejados y hastiales estaban
fabricadas con pequeños ladrillos rojos y decoradas con acabados de piedra y
adornos de escayola.
Nosotros con la escusa de San Nicolás nos fuimos a conocer y pasear por este
barrio típico holandés (foto 5), y ver esos detalles de las casas holandesas
(foto 6), y las costumbres y oficios holandeses de antaño (fotos 7 y 8)...