Hace dos años que no esquiamos, y para que no se nos olvide, volvemos a la
vieja Europa en busca de nieve, y realmente fue una búsqueda, ya que la nieve
estaba difícil de encontrar. Ha sido un invierno anticiclónico con altas
temperaturas, prácticamente no hay en ningún sitio, por lo que hay que recurrir
a las grandes y caras estaciones donde si tienen nieve en abundancia, pero la
cobran en Euros, y ya no estamos acostumbrados a estos precios...
Acabamos en el Tirol Austriaco, en las montañas Silvretta, y en la exclusiva
desde siempre estación de Ischgl. ?Quien no se acuerda de las películas de Sisí
Emperatriz?, pues es aquí donde se escapaba de la nobleza para ir a los refugios
de montaña y sentirse una persona normal. Y parece que la cosa aun no ha
cambiado, ya que estos días aparecía en la prensa local, las fotos de la Paris
Hilton, que vino a Ischgl a celebrar su cumpleaños. Bueno pues nosotros también
estamos aquí.
Del paisaje y la felicidad que provoca volver a esquiar, cuando hace ya un
tiempo que solo ve uno palmeras, pues lo podéis ver en la (foto 1). Respecto al
dominio de esquí propiamente dicho. Pues es una de esas macro-estaciones
perfectas, todo está nuevo, todo esta indicado, todo limpio (ya se, llevo
demasiado tiempo en Venezuela), las pistas inagotables (foto 2), interminables,
de los remontes (foto3): basta con decir que no hay siquiera un telesilla de
menor capacidad de 6 personas, vamos un derroche, una pasada. El paisaje, pues
estamos en el corazón de los Alpes que decir!!! (fotos 4 y 5).
Además tienen de todo, no solo para que los niños jueguen en parquecitos
infantiles, sino para los grandes, pistas de saltos, con y sin agujeros,
obstáculos, para snowboarding extremo, hasta una pista de descenso en la que te
puedes lanzar a toda velocidad, y todo el mundo puede ver lo valiente que eres,
vamos a la velocidad que vas, el puntito negro en medio de la (foto 6) es Heike,
y el 69 de la foto su velocidad, yo no llegué a tanto...
