Como el primer día en Lilafured hizo un tiempo terrible de niebla que imposibilitaba explorar las
montañas y un frío
que congelaba los lagos, optamos por un plan sencillo de darle la vuelta al lago helado de la poblacion y que se encuentra
junto al Hotel.
Lo rodea un camino bien trillado y sin problemas y con este tiempo invernal, pues se
podían hacer fotos muy interesantes
de lago y el río que lo alimenta que estaba congelado, igual que a una
pequeña cascada que baja congelada por las rocas.
En definitiva un tranquilo paseo sin complicaciones y pensando en regresar
rápido al hotel al spa, y baño termal o a
tomar un chocolate calentito.
Hay quien opto por patinar sobre hielo y jugar jockey, cualquier plan es interesante y diferente para disfrutar del
frío...