Salimos a dar una vuelta desde la capital de St Lucia, Castries en dirección
sur, el paisaje es montañoso (foto 1), y recorriendo la carretera nos
encontramos con una serie de valles y aldeas costeras bastante menos ajetreados
que la capital, donde pescadores y cultivadores de plátanos viven de espaldas al
turismo, tan solo algunos puestos de frutas o café encontraremos al borde de la
carretera que discurre entre plantaciones de plataneros (foto 2).
El primer lugar interesante que vemos en esta costa oeste de la isla, es Marigot
Bay (foto 3), con una bonita playa entre palmeras y varios catamaranes anclados
en ella. Esta bahía y puerto natural, se encuentra en una profunda ensenada de
paredes abruptas donde crecen las palmeras, que antiguamente servía e refugio a
los piratas.
El siguiente pueblo que visitamos fue la aldea de pescadores de Anse la Raye
(foto 4). Con construcciones de casitas sencillas (foto 5), aquí la vida
transcurre lenta y pacificamente. Después de esta aldea la carretera se desvía
hacia el interior, y trepa hacia la selva bajo el Morne Gimie, el pico más alto
de la isla de 950 metros de altura, para descender de nuevo a la población
costera de Canaries (foto 6)...