Sea o no el medio de transporte que utilices para moverte por Moscú, su
Metro es una de las visitas obligadas de la ciudad. Y no solo por dentro, ya desde fuera se
aprecia que es diferente, en la (foto 1), lo que parece la entrada a un teatro, es
"solo" la entrada del metro, precisamente de la parada Teatralnaya, en la plaza de
los teatros donde se encuentran entre otros el Bolshoy.
Se calcula que se utilizaron 70.000 m² de mármol, oro, cristal, mosaicos y metales
preciosos para embellecer las estaciones de la línea del metro de Moscú (foto 2).
La más visitada es la de Komsomolskaya, por su aspecto palaciego (foto 3). El mensaje que
Stalin quería transmitir en 1935 era claro: "nada era demasiado bueno para el pueblo soviético, y ninguna proeza tecnológica estaba fuera de su alcance", pero hay otras
muchas que se van descubriendo con detalles interesantes: candelabros gigantes fuera y
dentro del anden (fotos 4 y 5), mosaicos fluorescentes como en Mayakovskaya, esculturas como
en la entrada de Parque Kultury, figuras de bronce en Ploschad Revolutsi, y hasta un Museo
gratuito que muestra la construcción del metro de Moscú en Sportivnaya (foto 6)...