Qatar era solo una escala de unos días, pero el destino principal era no mas ni menos que el Nepal.
Ya desde el avión cuando nos acercamos al país, los nervios aumentan, y es que desde nuestra ventanilla ya
podemos divisar la impresionante cordillera del Himalaya, nuestro destino principal.
Ya aterrizados y pisando tierra nos damos cuenta que el
país no se va a parecer nada ni a uno europeo, ni
a un rico país árabe, solo hay que ver el descontrol y las colas para todo, recoger el equipaje, obtener la
Visa de entrada, etc...
La movilidad también es caótica, siendo las motocicletas uno de los medios de transporte mas utilizados,
también tuc-tuc, e incluso los taxis que no son excesivamente caros.
Siguiendo con las diferencias en las primeras impresiones, es que por ejemplo la bandera del Nepal, es la
única en el mundo que no es un rectángulo, sino dos
triángulos separados.
Beben mucha cerveza, y muchas marcas están relacionadas con la
montaña y el alpinismo.
Paseando por las calles de Katmandú, veremos los trajes usados por sus habitantes, que tienen un aire indio,
como son de precarios los cableados de las telecomunicaciones, pero sobre todo tiendas, puestos de comida de
todo tipo y restaurantes por doquier.
También todos los oficios están a pie de calle, costureros, panaderos, carniceros...todo un
espectáculo!!!