En el mes de Octubre, coma cada año desde que estamos en Bulgaria, la
última posibilidad de playa la encontramos en el cercano Mar Egeo griego, esta vez
elegimos precisamente eso, las playas más próximas a casa, estas se encuentran en la
región de Kavala a unas cuatro horas de Sofía.
A estas alturas de la temporada, ya no hace falta reservar nada, todo es más barato, y casi
no hay nadie, elegimos un sencillo y tranquilo hotel con piscina en la playa de
Ofrinio (foto 1), esta playa es absolutamente toda para nosotros, de hecho es un problema
decidirse por que sombrilla tomar (foto 2).
Fuera de temporada todo es más tranquilo, relajante y el día da para hacer de todo, Heike
opta por recorrer la playa con sus patines (foto 3).
Hay muy pocas poblaciones entre Ofrinio y la capital de la región, el puerto de Kavala, por
lo que la mayoría de las playas son salvajes y sin infraestructura ninguna, pero en cada
núcleo habitado encontrareis pequeños restaurantes donde comer vuestra ensalada griega y
calamaria diaria junto a su playa (foto 4). Y por supuesto podréis disfrutar de multitud de
esas solitarias y alucinantes playas sin nombre durante el todo el recorrido (foto 5)...