Jericó ha cambiado mucho de
manos en los últimos en el último siglo, durante 400 años fue parte del Imperio
otómano hasta 1917, luego estuvo bajo el Mandato Británico de Palestina, pasando
a pertenecer a Jordania entre 1948 y 1967, hasta ser conquistada por Israel en
la Guerra de los Seis Días. Desde 1994 tras los Acuerdos de Oslo pasó a estar
bajo la administración de la Autoridad palestina, o lo que es igual: controles
para acceder (foto 1) a cualquier Territorio Palestino.
Lógicamente su historia es mucho más antigua, el nombre de Jericó deriva de la
palabra hebrea "Iareaj", que significa "luna" (foto 2), y es sus habitantes
adoraban a la luna, o sea al dios "Ieraj", y es una de las ciudades más antiguas
del mundo (foto 3).
En la tradición judío-cristiana la ciudad es conocida como el lugar donde los
israelitas retornaron de la esclavitud en Egipto dirigidos por Josué, el sucesor
de Moisés.
En la actualidad, pasear por sus calles tiene poco interés (fotos 4 a 6), y la
ciudad en si, tanto de cerca como de lejos (fotos 7 a 8) pues tampoco.
Su principal atracción, es subir al Monte de las Tentaciones donde Jesús pasó 40
días y 40 noches siendo tentado por el demonio. Al monte, situado al norte de la
ciudad en pleno desierto de Judea se accede cómodamente por teleférico (foto 9),
aunque no hay nada interesante que ver, y si mucho calor que pasar (fotos 10 a
12).
También se pueden visitar justo en la entrada del teleférico uno de los
asentamientos prehistóricos de los varios que hay en la ciudad, y que abarcan
más de 11.000 años, concretamente en de Tell es Sultan (fotos 13 a 15)...