Pesca de Pirañas. Edo Delta Amacuro. Venezuela

Julio 2007

Nos encontramos lo más al oriente de Venezuela que se puede, donde ya se acaban los caminos y el gran Orinoco se rinde al mar, por el único capricho de mi hermana que quería comerse una piraña. Yo le dije que eso no es un problema en Venezuela, pero que primero tendría que pescarla, y que el Delta del Orinoco sería el lugar ideal para esa pesca.
Así que nos embarcamos en Piacoa en una pequeña curiara y nos internamos en el impresionante Delta del Orinoco.
Saliendo de Piacoa, en seguida conectamos con el río principal (foto 1), que aunque lleva mucha corriente, tiene aspecto de tranquilo y pacífico. Pero al cabo de un rato de navegación nos salimos del cauce principal, para explorar sus pequeños caños, y ríos en los que se divide y con los que forma el delta del Orinoco. Navegando por ellos se aprecia la exuberante flora y fauna de la selva. A ratos se estrecha, la vegetación cierra el paso, hay troncos caídos que hay que retirar, pero en cualquier caso el paisaje es brutal de precioso (foto 2).
Por el camino hacemos un alto en el río para darnos un baño (foto 3). Mi hermana que no tiene muy claro eso de ir a pescar pirañas y bañarse primero, ni se baja de la barca. Pero ya fresquitos y después de haber atraído a las pirañas, comienza la pesca (foto 4). Hay que tener mucha paciencia, y sobre todo mucha suerte, y al final cayó una (foto 5). Yo se que es un triste balance pescar una sola piraña en todo un día toda la familia, pero entre todos hicimos felices a mi hermana, que cumplió su deseo (foto 6)...