El valle del río Duero es famoso no solo por su paisaje,
sino por ser la fuente de la rentable industria del vino de Oporto. El
centro de esta zona vinícola es Pinhao, a donde se accede teniendo que
pasar antes por otra multitud de pequeñas poblaciones colgadas entre
viñedos (foto 1).
Pinhao se encuentra a orillas del Duero (foto 2), y aunque en invierno
está tranquilo, en verano es un constante ir y venir de camiones
cargados de uva para prensar.
Hay que destacar y no perderse de admirar su inmaculada estación de
ferrocarril, con sus muros decorados a base de paneles de azulejos con
escenas locales y vinícolas (fotos 3 a 5).
En Pinhao aparte de multitud de pequeñas "Quintas" productoras de Oporto
(foto 6), se encuentran todas las más importantes e internacionales
marcas de Oporto, y todas se pueden visitar, degustar y comprar sus
vinos.
Nosotros visitamos y recorrimos los viñedos de la conocida Sandeman
(fotos 7 a 11), en donde por supuesto hay visitas guiadas que te
explican su historia desde sus comienzos prácticamente artesanales (foto
12), pasando por las bodegas (fotos 13 y 14), y llegando a los modernos
métodos de pisar la uva (fotos 15 y 16), que si bien ya se hace con
robots, estos imitan el prensado que se hacía antiguamente con los pies.
El final de la visita claro está una degustación de los distintos tipos
de Oporto y la tienda para llevarte un "recuerdo" (fotos 17 y 18).