Vaduz.Liechtenstein

Octubre 2004

Liechtenstein, es uno de esos países que parecen sacados de un libro de cuentos. Situado en un fértil valle verde con su castillo colgado sobre las montañas (foto 1), y donde se respira paz y tranquilidad por todos sus rincones, pero es un país tan real, que su producto interno bruto "per cápita", es el más alto del mundo, seguido por Luxemburgo (también ocupado en la banca), y Brunei (petróleo).
Desde la posición privilegiada de este castillo (foto 2), que no se puede visitar, por ser la residencia del príncipe Hans Adam II de Liechtenstein, seguro que él si
puede ver y controlar la mayor parte de su país de 31.000 habitantes.
Una vez nos ponemos a sus pies, o sea debajo de su castillo, podemos pasear por su limpia capital, Vaduz, no hay mucho que hacer, ver su iglesia católica (foto 3), o pasear por el centro peatonal (foto 4), para comprar postales, recuerdos de nuestro paso por este minúsculo país, o sentarse en una terracita y tomar algo al sol...